3/4/14

La conciencia ecológica no es bandera de ningun partido es una necesidad para salvar nuestro planeta.

Lo hemos hecho mal muchos, muchos años y los seguimos haciendo mal.
Ayer comenzaron a devolver a sus casas a parte de los desplazado por el desastre de la central nuclear de Fukushima, seguro que no ponen el parlamento ni la casa del primer ministro del Japón en la zona para que vuelvan más confiados. Mientras, las recogidas selectivas de basuras selectivas siguen siendo un camelo y negocio para muchos, con vertederos ilegales o barcos que desplazan nuestros restos a lugares inconfesables sin control. Mientras hacemos la vista gorda a la contaminación de India o China, donde se permite la tecnología que nosotros rechazamos y que suponen un tercio de la población del planeta. Si tambien tienen derecho al desarrollo, si, pero no al desarrollismo, pero claro, no pusimos control a la entrada de sus productos textiles hechos con mano infantil o esclava, tampoco los sindicatos (eran paises ideologicamente afines), y no vamos a poner control ahora que todas nuestras multinacionales tecnologicas quintuplicaron sus beneficios trasladando sus fábricas allí.
La realidad es que seguimos con térmicas para producir electricidad altamente contaminantes porque un sector de la población quedaría sin trabajo, que seguimos manteniendo nucleares hasta los cincuenta años a pesar de los desastres, porque la inversion ya las pagamos entre todos y todo lo que dan son beneficios y encima las pagamos dobles por el peaje en el recibo para no montar más centrales o subvencionar el precio del carbon nacional, mientras producimos el 22% de eolica porque no se deja a los molinos funcionar más o prohibimos y penalizamos la producción de energía uso propio. No hablo del sobrecoste que supone mantener la industria energetica no contaminante porque eso es otra más de las estafas de las electricas, porque no se ha de subvencionar ninguna industria a lo sumo excenciones fiscales durante el peridodo de investigación y desarrollo y ha servido, como sirvieron las subvenciones en agricultura para crear nuevos ricos vinculados al poder politico con miles de mini huertos solares en zonas sin sentido destruyendo nuestro patrimonio paisajistico.
La otra realidad es que seguimos culpabilizando a los ciudadanos del descontrol energetico, del cambio climático y de la contaminación de nuestras ciudades, mientras se siguen paralizando la producción y comercialización de patentes menos contaminantes en motores de explosión, permitiendo que el agua dulce se siga transportando en canales abiertos o perdiendose en redes obsoletas bajo nuestros pies en las ciudades y todo ello se realiza controladamente para mantener acuerdos económicos con los paises productores de energias fosiles, con los oligopolios energeticos o las empresas embotelladoras multinacionales, pero donde los mindundis de a pie ni tienen voz ni tienen voto.
No se lo que esperamos los de a pie, lo que si se es lo que esperan los que controlan nuestra dependencia energetica, tener la tecnología y la legislación ultimada para que la energía natural, del sol, del viento, de las mareas, solo sea rentable a traves de sus redes de distribución, a través de sus manos, para cambiar en ese momento el petróleo por el ecologismo y aparecer como los salvadores del planeta.
Pero si se salva nuestra Tierra, será por los cientificos no vendidos, los ciudadanos de a pie que instalan sus paneles solares a pesar de la prohibición, GreenPeace y otros colectivos ecologistas no adscritos, que demonizados hoy mantienen la conciencia alerta.
La ecología no es una bandera partidista, ha de ser una conciencia transversal, porque nos incumbe a todos y en nuestro pais lo veremos antes que en muchos sitios, y empezará por la costa andaluza de Cadiz y Huelva, donde el aumento del nivel del mar se hará evidente antes.
Entonces llegará el momento de los hoteles de primera linea, con los bajos inundados, para reclamar indemnizaciones por cese de lucro, de los particulares ni me lo planteo, se les traslada y tan contentos, y el momento de las grandes obras de defensa contra las innundaciones con tecnologias holandesas que de eso saben mucho, pagados por todos.
Pero ese momento que está cercano estamos a tiempo de minimizarlo, solo es cuestion de exigir a todos los partidos, a todos tambien los conservadores, que asuman que con el suelo que se pisa y agua que se bebe o el aire que se respira ni se juega, ni se comercia, ni se vende, porque es de todos sin exclusión.
Por eso campañas como esta de GreenPeace son imprescindibles aunque no debieran ser las únicas acciones que tomemos.

http://www.greenpeace.org/espana/es/Que-puedes-hacer-tu/Ser-ciberactivista/el-artico-se-derrite/