21/4/12

Vidas paralelas. Aniversario de Expo '92 - Aniversario del Jardin Botanico Atlantico.

Veinte anos atras, un dia como hoy, a las ocho de la manana finalizabamos los ultimos remates antes de la inauguracion de la Exposicion Universal de Sevilla. Tras revisar todos los equipos que llevabamos practicamente sin dormir una semana y dar las ultimas instrucciones a los que permanecerian en el mantenimiento ese dia, me encamine a casa a ducharme y vertir de corbata para el acto inaugural. Fue un dia inenarrable, no solo por la presencia de tantas personslidades en mi ciudad, sino sobre todo por ver que el equipo lo dio todo y que el resultado de nuestra parte estaba cumplido. Once anos despues las contratas y subcontratas  estabamos sentados a esa misma hora en el bordillo del aparcamiento del botanico. Alfredo, el delegado de Ohl habia conseguido,que la cafeteria del Hospital de Cabuenes nos cedieran sus termos y prepararan unos bocadillos para descansar un poco antes de la ultima hora de remates y ahi estabamos todos, desde el ultimo peon contratado al director cientifico, reventados, sin hablar, mirando las caras del de al lado, sabiendo que quedaban dos horas, pero que habiamos conseguido lo que 24 horas antes nadie creia 'inaugurabamos'. Ese dia no fui a casa, mi mujer me acerco un traje y me duche en la Casa de la Isla, que Jesus Oliva me habia ofrecido amablemente para estar decente en la inauguracion.
En ambos casos los plazos se cumplieron. La Expo: cuatro anos para crear una ciudad completa de la nada, la mas avanzada, accesible y sostenible de la epoca; el Botanico de Gijon: cuatro meses para tratar de contar de otra manera, la naturaleza que nos envuelve. En ambos casos demostramos que con un buen proyecto , un equipo que se lo cree y voluntad, se pueden acortar a un tercio los plazos. Dira alguien ' y dinero', por supuesto, pero no lo mas importante, sin equipo, ideas y proyecto, el dinero que habia no hubiera llegado y por supuesto los plazos no se hubieran cumplido, creo que no tengo que poner ejemplos cercanos ni lejanos para justificar lo evidente.
En ambos casos el disfrute no fue completo. Hace 20 anos la realidad externa se imponia. Mientras unos inaugurabamos, en la calle, los indignados de entonces, se manifestaban contra la conquista de America de 500 anos atras. Unos cuantos se encadenaron en uno de los puentes de la Expo, entre ellos mi hermana pequena. Deje a mis invitados paseando por la Expo, llame a amigos hasta encontrarle abogado, hable con los prohombres de Expo que me garantizaron que no habria denuncia y finalmente resignado a que pasaria varias horas, dias, en los calabozos hasta que las personalidades hubieran dejado la ciudad, volvi a la Isla de la Cartuja sin dejar de pensar en ella, recorri taciturno la Expo con mis invitados, mientras los ojos se iban, para no pensar, a los muchos remates que faltaban. Finalmente el abogado me tranquilizo tras haberla visto y terminaron saliendo sin cargos y con la policia amonestada por la desproporcion en su actuacion contra una manifestacion pacifica. La satisfaccion cansada se habia tornado amargura. En el botanico la amargura habia llegado un dia antes, cuando ciertos tecnicos que apenas habian pasado por la obra, pretendian abortar la inauguracion unas horas antes, porque no creian que fueramos a llegar, o porque querian darse una importancia que su ausencia cuando se les necesitaba, les negaba ahora. Al final queda la satisfaccion del esfuerzo realizado y ver que 20 y 9 anos despues, la parte del trabajo que te toco hacer, sigue haciendo disfrutar a quienes lo visitan y/o lo recuerdan. Tras este tiempo la imagen que se impone sobre las demas es que el sueno de unos pocos, yendo a una, consigue superar los mayores contratiempos. En los tiempos que corren necesitamos recuperar parte de ese espiritu.